El stroll.
En la década de los 60 se pusieron de moda varios
estilos de baile, nuevas formas de ver la vida, y la juventud seguía pidiendo
cambios a gritos, en una sociedad que crecía a pasos agigantados, queriendo demostrar al
resto del mundo su independencia, siendo el baile y en especial el stroll
(andar despacio) uno de ellos.
Se
bailaba de la siguiente manera. Se forman dos filas de mujeres y hombres,
enfrentados entre sí. La pareja principal se mueve entre ambas líneas, y se
unen al final de la fila, que se movía cada vez que una pareja pasaba al
centro.
El
stroll estaba hecho para las canciones lentas, y se hizo famoso por un tema,
que se convirtió en un exitazo a cargo de The Diamonds. Este "dance", junto al
madison bajó del pedestal a otro gran baile del momento como era el Twist. El
madison y su compañero el stroll eran unos bailes “grupales”, que mezclaban los
bailes de salon europeos con la gran música rock, de ahí su éxito.
Este
baile ya era popular en los clubs negros antes de que saltara a la fama con los
Diamonds. El rey del stroll era Chick Willis. Volviendo la vista atrás este
divertimento (por no volver a repetir otra vez baile), me recuerdan a los
bailes de los primeros pioneros americanos, en su lejana sociedad puritana,
anticuada y llena de prejuicios, donde se bailaba separado, para juntarse todos
en el centro de la pista de baile. Sí, claro que hay una excepción como era en
la alta sociedad, donde estaba bien visto que las parejas bailaran juntas el
vals. En fin creo que sobran las palabras…
"Como todo en la vida estos bailes, al igual que en la música, la moda, y el sentir de varias generaciones, siempre deberán de permanecer muy vivas en nuestra memoria"
Es bueno que nos hagas recordar viejos bailes de tiempos pasados tío, pero estás hecho un dinosaurio, y encima amariconao. Donde están los bailes esos que consisten en agarrar bien a una dama?
ResponderEliminarComo bien dijo Dick Dale: "La música dejó de ser música el día en que la gente dejó de bailar para solo mirar al escenario", eso si que es ser amariconao, con perdón y en el buen sentido de la palabra. Boniato, deja el anonimato de una puñetera vez, ¡da la cara tío!
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